Una vuelta de tuerca
Dicen que una persona es más feliz cuando tiene la capacidad de reírse de uno mismo y la abstracción de reconocer sus defectos, el caso es que en mi pellejo debe de ser que lo uno va unido con lo otro, porque llevo muchos años haciendo lo primero, y una de mis no virtudes es la constancia.
Sea por lo que fuere, el caso es que me hallo en la necesidad de dar una vuelta de tuerca a este escaparate, y después de más de un mes de dar protagonismo diario a lo humano, he decidido darle una oportunidad a los espacios.
Se trata de lugares que me evocan, que me dejan respirar, que no me agobian, que no hablan pero transmiten, que no generan ruido y sin embargo pueden ser muy sonoros.
Abro la puerta… mi puerta, a las visiones que me dan la inspiración, que me hacen moverme.
Tu palacio… interior
Vale, aceptamos pulpo com animal de compañía…..jejeje…me gusta….mi palacio interior.
Beso
Muy despojado el lugar, permite sentar en ese banco la mente y dejarla discurrir…