San Salvador de Leyre
Hoy he cumplido uno de esos caprichos tontos que uno tiene en la vida, y es que después de haber elegido el nombre de Leyre para nuestra hija, y de que ésta hubiera nacido, se me metió entre ceja y ceja que tenía que volver a este enclave para hacerle la primera foto oficial de una excursión en su vida.
Hoy lo he hecho realidad, ha sido muy especial.
Leyre en Leyre.
Precioso momento retenido para el comienzo de un cuaderno de bitácora